Una perra llamada Eliza June fue arrojada a la carretera por sus dueños, lo que trágicamente la llevó a ser atropellada por un automóvil, escribe ilovemydogsomuch
Cuando un equipo de rescate la encontró, Eliza June estaba confundida, temblando y llorando por el trauma aterrador.
Mientras sobrevivió a la terrible experiencia, el refugio luchó por aceptar sus cicatrices mentales y la llamó «muy agresiva».
Una mujer llamada Annie Morgan se ha ofrecido como voluntaria para la ardua tarea de criar a Eliza.
El pobre perro sufría de una pelvis rota, una cadera fracturada y un pulmón magullado, pero fueron sus heridas emocionales las que se manifestaron en problemas de comportamiento inmanejables.
Eliza había desarrollado una asombrosa fobia al contacto humano y se estremecía al ver una correa o un collar. Durante sus primeros días en el hogar de acogida, se tomó su tiempo para familiarizarse con Annie.
Eliza dobló una esquina corriendo y se encerró, como si esperara que Annie la lastimara. El lenguaje corporal encorvado y dominado por el miedo de Eliza fue desgarrador para Annie, pero se volvió aún más decidida a reparar al bebé roto.
Este video brinda una visión desgarradora de cómo Eliza repara su alma hecha jirones después de encontrar un refugio seguro con Annie.
¡Es difícil creer que esos tiernos besos y el movimiento de la cola al final del video son del mismo perro asustado del comienzo del video! ¡Eliza no solo se convirtió en la querida más dulce, sino que también logró reemplazar «foster» con «forever»!
¡Estamos muy orgullosos de ella y de Annie! Haz clic en el video a continuación para ver a Eliza abusada superar sus crecientes problemas de confianza y sanar su alma maltratada.