Mientras caminaban por la ciudad, vieron un gato. Yacía inmóvil al costado del camino, incapaz de moverse. La pareja se puso en contacto con el refugio, que de inmediato se dirigió a la dirección indicada y llevó al gato al veterinario.
La gatita, llamada Belle, tenía cuatro años y el veterinario dijo que estaba lista para dar a luz. La pobre tenía un gran moretón en el estómago.
Resultó que los gatitos ya no estaban vivos y ella tenía otros problemas de salud debido a un fuerte golpe en el estómago. Belle fue operada rápidamente. Afortunadamente, todo salió bien y el gato ahora se encuentra en una fase de recuperación a largo plazo.
Ahora puede comer y beber alimentos y agua por sí misma. Ella también tiene problemas en las articulaciones de las piernas, por lo que una trabajadora del albergue la atiende constantemente para ayudarla y apoyarla en esta difícil situación.
Esperamos que este cuidado y apoyo la ayuden a recuperarse rápidamente. El personal del refugio también espera que Bella, que es tranquila, obediente y muy amorosa, encuentre un dueño amoroso que la ayude a olvidar todas las dificultades por las que ha pasado.