Recientemente, Amy Adams fue vista grabando escenas para su próxima película Nightb en Los Ángeles.
Ese día, la actriz llevaba pantalones anchos, cómodas Birkenstock de color marrón y una blusa de rayas suelta.
A diferencia de sus habituales y glamorosos looks en la alfombra roja, se veía mucho más sencilla y natural, casi como si quisiera pasar desapercibida.
En una de las escenas, golpeó a su compañero de reparto, Scoot McNairy, pero su expresión facial no mostraba ira ni agresión.
En lugar de eso, su rostro reflejaba más bien una sensación de arrepentimiento, como si el golpe tuviera un significado mucho más profundo.
No era un gesto de violencia, sino un momento de duda interna y reflexión.
Más tarde, durante las grabaciones, se les vio a los dos actores en una escena completamente diferente: se tomaban de las manos mientras Amy sonreía ampliamente hacia las cámaras,
como si ese gesto de ternura equilibrara la escena anterior llena de remordimiento.
La trama de la película gira en torno a una ama de casa de suburbio que se va perdiendo cada vez más en las rutinas de la vida familiar,
mientras lucha con el miedo de que está comenzando a transformarse en un perro, una metáfora surrealista de la pérdida de identidad en medio de una vida monótona.
Este concepto profundo y emotivo fue reportado por Variety, lo que aumenta las expectativas de que la película no será solo una comedia ligera o un drama convencional.
Junto a Amy Adams, también participan Ella Thomas y Garrett C. Phillips, lo que aporta aún más riqueza y diversidad al proyecto.
Amy, que está casada con Darren Le Gallo y tiene una hija de 12 años llamada Aviana, intenta equilibrar su intensa carrera con las necesidades de su familia.
A pesar de los desafíos que su trabajo como actriz implica, Amy se esfuerza por compartir su tiempo con los seres queridos durante las pausas entre los rodajes.
Este delicado balance se vuelve aún más evidente al considerar que recientemente aceptó unirse a este proyecto, una decisión que tomó con plena conciencia y pasión.
Su participación en Nightb llega en un momento marcado por experiencias intensas, tanto personales como profesionales.
Christian Bale, en el pasado, mencionó cómo durante el rodaje de American Hustle actuó como mediador entre Amy y el director David O. Russell.
Según correos filtrados, Amy Adams estaba «profundamente herida» debido a las presuntas actitudes de «acoso» de Russell hacia ella durante la producción.
El supuesto maltrato emocional la dejó muy afectada, y la situación la sobrecargó emocionalmente, dejándole una huella perdurable.