En 2012, Christopher Meloni decidió probar suerte en uno de los programas más populares del Reino Unido.
Cuando subió al escenario, infló sus mejillas de manera cómica, su voz temblaba y sus manos no dejaban de temblar. En su traje deportivo, no parecía en absoluto un cantante.
Parecía que su actuación estaba destinada al fracaso.
Detrás del escenario, su madre, también nerviosa, pero manteniendo la compostura, lo observaba.
Las preguntas del jurado aumentaron aún más su ansiedad, y parecía que iba a desmayarse en cualquier momento.
Sin embargo, cuando comenzaron a sonar las primeras notas y su cálido barítono llenó el aire, la sorpresa fue inmensa. El jurado quedó paralizado por la fuerza y belleza de su voz.
Cantaba sobre el amor y, a través de la música, contaba la historia de una relación apasionada entre un hombre y una mujer.
Las mujeres del público se secaban las lágrimas, mientras los hombres no podían dejar de negar con la cabeza, incrédulos.
El público estaba cautivado, y a mitad de la canción, tanto los espectadores como los miembros del jurado se pusieron de pie, mostrando su admiración por el talento del joven inglés.
Él continuó cantando y regalaba a todos momentos de música sublime.
Este video es imperdible. Sumérgete en la atmósfera que convierte a un joven común en una estrella.
El clímax llega a las 2:41, cuando el salón estalla en aplausos.
Meloni se inclinó y no pudo contener las lágrimas. Al principio no entendió que los aplausos eran para él, pero luego sonrió. El jurado expresó su admiración, y él subió a su madre al escenario.
Esa noche nació la joya vocal de Inglaterra. Mira lo que le dijeron luego los miembros del jurado. ¡¡Es algo que tienes que ver!! ¡¡Esas tres minutos de triunfo no tienen precio!!
