Un niño de seis años que estaba desaparecido fue encontrado muerto junto a su padre, y la policía de Michigan está investigando el caso como un posible asesinato-suicidio.
La madre del niño contactó a la policía el lunes 19 de agosto después de que el padre del niño no lo devolviera a su custodia a la hora acordada. Se inició una búsqueda de varios días, y el miércoles 21 de agosto se confirmaron los peores temores.
La noche del 19 de agosto, la Oficina del Sheriff del Condado de Isabella en Michigan recibió una llamada de una madre desesperada que informaba que su hijo de seis años estaba desaparecido. El padre del niño se suponía que lo devolvería esa mañana, pero no apareció.
Mientras la madre del niño compartía fotos de su hijo en Facebook, los agentes acudieron a la casa de Michael Steven Winchell para buscarlo a él y a su hijo, Rowan Milford Morey.
La policía continuó la búsqueda durante las siguientes 24 horas, pero no pudo localizar a Winchell ni al niño. Los detectives pudieron localizar a un familiar de Winchell, pero tampoco lograron contactar con el padre de 48 años.
El 21 de agosto, miembros de la familia llegaron a la propiedad de Winchell para ayudar con la búsqueda. Mientras buscaban en el terreno, alguien descubrió una caravana aislada en la parte trasera de la propiedad.
Rompieron una de las ventanas de la caravana y vieron a Winchell, que parecía estar muerto. La policía forzó su entrada en la caravana y encontró a Winchell y Rowan muertos.
Aunque el caso sigue bajo investigación, los primeros informes sugieren que Winchell disparó a su hijo antes de apuntarse con el arma a sí mismo.
«Gracias por enviar sus oraciones para un regreso seguro. Desafortunadamente, se confirmaron nuestros peores temores y Rowan ha sido encontrado, pero ya no está con nosotros», compartió la madre de Rowan en Facebook después de que encontraron a su hijo.
No tengo palabras. ¿Cómo puede un padre disparar y matar a su propio hijo?
